Los estatutos de la mujer
... a la manera de Thiago de Mello
quien escribió Los estatutos del hombre.
La era está pariendo un corazón…
—Omara Portuondo
Pero si ya pagamos nuestros pasajes en este mundo,
¿por qué, por qué no nos dejan sentarnos y comer?
—Pablo Neruda
Cielopájaro Nuestro de cada día
Ave fugaz, he inventado tu existencia porque no tengo nada más a qué agarrarme. No creo en Dios y esta declaración me hiere profundamente. Vivo en orfandad. Ningún hombre que he amado ha podido salvarme.
Hoy solo tengo la imagen de Aylan Kurdi, niño kurdo-sirio de tres años muerto a orillas de una playa de Turquía este septiembre de 2015. Hacía como si durmiese, fondillito trepado como duermen los infantes. Su fotografía está pegada a las membranas de mis ojos. Mi pequeño niño se parece demasiado a Aylan. Y he comenzado a temer por su vida.
Quiero saber qué destino ha dictado que Aylan muriera y mi niño de apenas un año camine libre sin ninguna avalancha que le niegue su libertad.
Cielopájaro Nuestro. Quiero contarte, ave de fuego, como si fueras un amante, que tengo el peso de tantas vidas en mi conciencia.
Entre los ahogados, la madre del pequeño y su hermano Galip de cinco años. El padre fue encontrado semi-inconsciente y llevado a un hospital, donde logró recuperarse. Dicen las noticias. ¿Recuperarse?
Oh ave del cielo, como si pudiera un hombre levantarse con dos hijos y su esposa muerta.
Quiero decretar el derecho a que nos dejen vivir en la tierra que pisamos, que nos dejen sentarnos a la mesa y comer.
Quiero decretar la abolición de todas las fronteras.
Quiero decretar sin que tengamos dudas, que el único Dios que nos guía es la conciencia inteligente que cree en una justicia social para todos, hombres y mujeres.
Quiero decretar la abolición de todas las religiones del mundo. Tantas muertes y masacres en nombre de algún Dios.
Quiero decretar absoluta libertad para el amar, hombres con hombres, mujeres con mujeres, hombres con mujeres, libres para tomarnos las manos en todas las plazas.
Quiero decretar absoluto respeto a ese jardín de la niñez que nunca tuve.
Quiero decretar la fuerza de nombrar como si nunca hubiéramos nombrado al cielo y al mar, la tierra y las estrellas. Porque de ahora en adelante los poetas regresaran de su exilio, y todo tendrá un nuevo nombre.
Quiero decretar que todas las mujeres son las madres de todos los hijos del mundo. Que nunca más habrá orfandad.
Que el pan es de todos, la tierra de todos, y todo hombre y mujer son mis hermanos, aunque ese hombre o esa mujer haya asesinado.
Quiero decretar que los árboles son también humanos, dejadlos en paz, quieren quedarse quietos.
Quiero decretar el poder de mis manos y las tuyas para multiplicar el pan y los peses en todas las mesas del mundo.
Quiero decretar que nunca más un hombre usará su fuerza para someter a una mujer. De hoy en adelante el planeta será regido por el reino del amor, y solo las mujeres que son las que pueden concebir, pueden ordenar el árbol de la vida.
Quiero decretar que el Paraíso está en el punto culminante del orgasmo y que se le ha otorgado a todas las mujeres el poder multiorgásmico que un día cambiará el orden del universo.
Quiero decretar la abolición de todas las banderas.
Quiero decretar que los animales y los humanos tienen la misma importancia jerárquica que la rosa, y que bajo ninguna circunstancia la rosa estará encerrada en una copa de cristal.
Quiero decretar que después de Alejandra Pizarnik, todas las jaulas serán pájaros.
Quiero decretar que los girasoles no tendrán que mirar al sol para encenderse y que habrá girasoles de todos los colores.
Quiero decretar por orden de todas las fuerzas del universo y de todas las galaxias más allá de la nuestra, que el mar devolverá a sus ahogados, y que el niño Aylan Kurdi jugará con Leo y con Thiago por los campos de mi isla libre de todos sus yugos.
Quiero decretar que jamás una mujer parirá con dolor.
Quiero decretar que hoy por fin seré feliz junto a todas mis hermanas.
* Texto escrito a modo de Invocación para el Primer Encuentro de Poetas del Atlántico en septiembre de 2015 en Vega Alta.
Lista de imágenes:
1. Sonia Pulido, "Gertrud Kolmar ante el destino", 2010.
2. Sonia Pulido, "Sonia Pulido y Enrique Vila-Matas", 2013.
3. Sonia Pulido, "El viaje", 2015.